¿Cuánto vale un bitcoin? ¿Cómo y quién determina su precio?

¿Cómo se determina cuánto vale un Bitcoin?

Si en enero de 2010 hubieses comprado 100 € de Bitcoin y los hubieras vendido en noviembre de 2013, el valor de la venta hubiera sido de 120.000.000 €. No está nada mal ¿verdad? Pasar de 100€ a 120 millones de euros en tan solo 3 años. Y todo ello con una inversión de risa, parece un sueño. Pero la verdad es que con Bitcoin y sus subidas de precio ha sido posible. De hecho, en 2021 bitcoin ha logrado romper la barrera de los 60.000 US$.

Ahora bien seguramente te preguntarás: ¿cómo se determina cuánto cuesta un Bitcoin? 

Como hemos explicado, Bitcoin es un sistema financiero distribuido, creado en 2009 por un programador bajo el pseudónimo de Satoshi Nakamoto. No está emitido por ningún gobierno ni empresa (pese a que cada vez está más respaldado por estos) y es considerado moneda de curso legal por muy pocos países hasta la fecha (aunque ya empieza a encajarse en marcos legales existentes, como la sentencia que determina al Bitcoin exento de IVA en toda Europa o la Ley Bitcoin que la convirtió en moneda de curso legal en El Salvador).

Bitcoin es poderoso y una pieza maestra de la ingeniería (o como Bill Gates dice de él: «una hazaña tecnológica»). Pero, ¿cuánto vale un Bitcoin?, ¿por qué sube y baja su precio tantas veces al día?, ¿quién determina su valor?, ¿qué seguridad tiene ese precio?, ¿es una estafa, ponzi o mecanismo extraño para robarme el dinero?

Bitcoin como dinero

Como todos sabemos, el dinero es aquello aceptado como medio de pago por un bien o un servicio. El dinero suele servir como unidad de cuenta y depósito de valor entre otras características.

Pero… ¡un momento! Si una divisa no es aceptada como medio de pago, por mucho que sea genial como unidad de cuenta, y todo lo que quieras… ¿vale algo? Es por ello que el valor del dinero no va vinculado a su aceptación, sino que está directamente relacionado.

El dinero fíat (denominación de la moneda fiduciaria oficial emitida por un Gobierno, como los euros o dólares) tal como lo conocemos hoy, no son más que billetes y monedas sin valor propio. Desde 1971 no están respaldados por el valor en oro. Están avalados y certificados únicamente por sus entidades emisoras.

Actualmente son los gobiernos, a través de leyes impuestas, quienes determinan cuál es el tipo de dinero de curso legal. Pero son otras entidades, como los bancos centrales y las casas de la moneda (CECA), los que se encargan de todo. Primero, de regular y controlar la política monetaria de una economía. Segundo, de crear las monedas y billetes según la demanda y la necesidad de tener dinero físico y electrónico. Pueden imprimir y acuñar tanta como quieran y en el momento que quieran.

No importa la franja temporal de la historia que elijas, este modelo ha demostrado fallar una y otra vez. Sólo basta echar la mirada atrás en lo que ha ocurrido durante el siglo XXI: crisis financieras, corralitos, inflaciones descontroladas, etc.

Las divisas emitidas por los bancos centrales son necesarias para que estos puedan aplicar, de forma opaca, políticas económicas concretas. Esto deja al antojo de unos pocos el destino de millones de personas. A golpe, literalmente, de clic pueden generar nuevos millones de euros en un ordenador que devalúen el poder adquisitivo de las personas.

Y es que, como ya explicamos, Bitcoin posee mejores propiedades que el dinero fiat. Esto resulta imposible con Bitcoin y otras monedas virtuales o criptomonedas, ya que el control de la emisión es descentralizado y nadie lo controla.

Oferta y demanda

Pero, ¿quién determina el precio de un Bitcoin (BTC)? Lo determina todo aquel que quiera participar en su proceso de compraventa, en resumen: sus usuarios. Aunque influyan múltiples factores, en última instancia, su uso es el que siempre determina su precio.

El comercio de bitcoins permite distribuirlo y beneficiarse por ello. Como en otros escenarios, los productores (en el caso de Bitcoin: los mineros) pueden proponer un precio al vender sus bitcoins a los interesados llegando a acuerdos. Imagina los típicos tratos entre dos personas, una propone un precio y si la otra, entre regateos, está dispuesto a aceptarlo, entonces tiene lugar la transacción.

Esto puede hacerse en la calle, pero, en un mundo informatizado como el nuestro, es más común ver este tipo de tratos en plataformas online especializadas y optimizadas para ello. Las conocidas «plataformas de trading Bitcoin«.

A diferencia de una web de compra – venta, que tiene sus precios estipulados como en Bit2Me, en una plataforma de trading cualquiera puede publicar una propuesta de compra al precio deseado.

En los mercados de trading tampoco tienes obligación de comprar un Bitcoin completo, puedes comprar pequeñas partes del mismo. Recuerda que 1 Bitcoin está compuesto de 100 millones de «céntimos» (satoshis). Si un Bitcoin vale 1000 €, puedes comprar 1 euro si lo deseas.

En estas plataformas, cuando otra oferta de venta coincida con la tuya, automáticamente, se hace la transacción. Esta operación de compra – venta hace, solo en esa plataforma, que el precio del Bitcoin se fije al precio del intercambio realizado.

Esto que acabamos de describir es el mismo proceso en el que se comercia todas las materias que existen. Y ocurre decenas, centenares o millares de veces por al día, a veces con grandes variaciones.

Este tipo de operaciones requieren de un mínimo de estudio y tareas previas, que aunque sin coste, no todos los usuarios están dispuestos a hacer.

Para muchos usuarios esta parte de Bitcoin no es atractiva e incluso les repele, puesto que parece que no aporta nada y la mayoría de las veces es simple especulación. Comprar barato y vender caro. Pero lo cierto es que este modelo está haciendo que Bitcoin se difunda y llegue a más sitios.

El precio de Bitcoin ha ido cambiando a lo largo del tiempo y se basa, grosso modo, en la confianza de sus usuarios, en su utilidad y su popularidad.

Significa que, en 2010, el valor de un Bitcoin era menos de un céntimo de euro, pues muchos aún dudaban de su seguridad, eficiencia y, en definitiva, su aceptación.

Esta operativa de determinar el precio a través de la compra – venta no es diferente a la que ocurre en otros sectores: divisas de curso legal (Forex), materias primas, bonos, … Pero en Bitcoin tiene un doble objetivo, puesto que esto al mismo tiempo, al tratarse de algo digital, ha sido clave para su capilarización, extendiéndose de forma rápida.

El valor de un Bitcoin, al igual que cualquier cosa que te imagines, fluctúa a cada segundo. Hay mucho recorrido. ¿Qué pasaría con el precio de Bitcoin si mañana Amazon decide aceptarlo como medio de pago? Nadie sabe que pasará, ni tan si quiera si ocurrirá, pero es posible que ocurra igual que con miles de grandes empresas, países,…

No existe un precio oficial o único del bitcoin

Una vez explicado lo anterior entenderás que, al no existir una única plataforma en el mundo donde comercializar (existen muchas y cada una puede tener sus operaciones), no existe un precio mundial o único del Bitcoin.

No obstante, tienden a equipararse. Cuando hay diferencias muy grandes en los precios de dos casas de cambio, hay quien aprovecha para comprar en la casa de cambio con precio barato y vender en la de precio caro. Esto, que es algo que se hace a diario, es conocido como arbitraje y provoca que los precios se igualen en la mayoría de casas de intercambios en pocos minutos.

No obstante, no en todos los sitios ocurre, sobre todo en lugares con gran complejidad de acceso. Por ejemplo en África, donde es más complicado acceder a los Bitcoins, los usuarios locales pueden intercambiarlos a un precio muy diferente al de Europa y ser igualmente de atractivo por que a la comunidad local le es útil comerciar a ese precio.

Bitcoin como medio de pago

Algo curioso de Bitcoin, pese a no haber cambiado su código fuente en exceso desde su inicio, es que pasó desapercibido durante mucho tiempo. Además, los pocos que le prestaron atención no lo tomaron en serio como para ser una alternativa firme al sistema financiero tradicional.

Durante más de un año un Bitcoin no valía absolutamente nada. Era una moneda que muy pocos usuarios, curiosos o visionarios en su totalidad, se mandaban como recompensa de respuestas útiles o graciosas en foros.

El primer precio de un Bitcoin de la historia ocurrió el 22 de mayo del 2010. Esto fue en el foro BitcoinTalk, donde el usuario jercos decidió comprarle con su tarjeta de crédito dos pizzas al usuario Laszlo a cambio de 10,000 bitcoins, posiblemente con una tasa de cambio de 1BTC = $0.003.

Este simple hecho supuso la chispa que encendió un proceso acelerado de revalorización. Los entonces poseedores de bitcoins se dieron cuenta de que podrían acceder a bienes o servicios con sus actuales criptodivisas, hasta la fecha sin valor económico, dejando patente que Bitcoin definitivamente sí tenía capacidad de convertirse en lo que su ideólogo y creador, Satoshi Nakamoto, había propuesto: un sistema financiero mundial alternativo y mejorado.

Esto hizo que mucha gente vendiese bitcoins que antes no tenían valor por unos pocos euros. ¡Imagínate! Tienes 10.000 bitcoins que has obtenido gratuitamente o a un euro, y de repente puedes obtener por todos 100€.

Solo algunos visionarios (o, seguramente, despistados en su mayoría) pudieron encontrarse situaciones como las de 2013, con millones de euros entre las manos o intentando encontrar un ordenador con miles de bitcoins que hubiesen tirado a la basura por error. Pese a eso, 2013 fue un año de muchos nuevos millonarios gracias a Bitcoin.

Historial del precio de Bitcoin

Después de 10 años de su creación, Bitcoin se caracteriza también por su alta volatilidad. A lo largo de su corta, pero intensa existencia, un solo Bitcoin ha pasado de valer literalmente nada a casi 66.000 dólares americanos. Los exchanges o mercados de criptomonedas nos pueden mostrar un historial muy detallado de cómo el par BTC/USD ha evolucionado durante todo este tiempo. Toda esta información nos puede ayudar a elegir el mejor momento para invertir en Bitcoin.

Halving

Como ya hemos explicado en el artículo: ¿qué es minar bitcoins?, los Bitcoin se crean como recompensa a los mineros. La recompensa, estipulada en el código abierto de Bitcoin, se divide a la mitad cada 210.000 bloques, unos 4 años aproximadamente, si se tiene en cuenta que cada bloque se mina cada 10 minutos de media.

Este suceso de dividir la recompensa a la mitad cada 4 años aproximadamente es conocido como Halving. Todo Bitcoin que existe fue propiedad, primero que nadie, de un minero y es la forma en la que se van liberando los 21 millones de bitcoins que existirán.

Hay quienes opinan que tras un halving el precio del bitcoin en los mercados sube debido a la causa – efecto que genera en el ecosistema.

Eventos externos

En un sistema de oferta y demanda, todo evento interno y externo tiene un efecto sobre el precio. Son muchos los eventos positivos y negativos que han ocurrido en Bitcoin, por ejemplo uno de los más dramáticos fue el caso de MT. Gox, el cual a día de hoy aún sigue sin resolverse: la casa de cambio de Bitcoin más grande y famosa, MT. Gox, muestra una página en blanco en su web el 24 de febrero de 2014, dejando una deuda de más de 850.000 Bitcoin a sus usuarios, valorados en más de 450 millones de dólares americanos en aquel entonces.

O en 2022, con la caída del exchange FTX debido a sus malas prácticas con los fondos de sus clientes. Previamente, también habían caído Celsius o Alameda Research, creando un año, el de 2022, de pánico en el mercado.

Estos eventos de fraudes y robos de criptomonedas en mercados especializados dejan huella en los traders, y por consecuencia en el precio del Bitcoin, normalmente de forma proporcional al eco que los medios de comunicación hagan del suceso.

Estos sucesos, que poco tienen que ver con Bitcoin y su tecnología, afectan a su reputación, sobre todo cuando medios de comunicación consciente o inconscientemente lo relacionan a fallos en Bitcoin sin explicar en detalle lo ocurrido.

Los mineros

¿Qué influencia tiene los mineros en el precio de bitcoin? Los mineros son una pieza esencial en el ecosistema y también su postura generalizada puede producir subidas o bajadas en el precio de alguna forma. Pero más que fijar precios, normalmente, en ellos se observan las consecuencias. Basta fijarse en el mapa de nodos activos, y ver como desaparecen nodos cuando el precio de Bitcoin es bajo. Muchos de ellos simplemente se desconectan debido a que la recompensa no es suficiente para cubrir gastos y obtener beneficios.

Los mineros están relacionados con el precio por pura lógica. El precio de cada Bitcoin viene representado por su valor de minado. Pero su valor de minado no siempre es el mismo. Debido a la complejidad dinámica en el minado de Bitcoin, este puede costar más o menos dependiendo de la competencia. Minar tiene altos consumos eléctricos y esos consumos tienen un coste. De esta forma, si de repente se dispara la demanda, minar será tan rentable que muchos otros mineros querrán ganar dinero, y al ponerse a minar suben la complejidad del minado, con lo que el coste volverá a aproximarse a lo que la gente esté dispuesto a dar por cada Bitcoin, ya que si no, no sería rentable.

Este modelo genera un tira y afloja que hace que el precio del Bitcoin siempre esté respaldado por su coste de minarse, por lo que el Bitcoin tiene un valor intrínseco, y no es fíat.

Bitcoin se caracteriza por disponer, y es una de sus mejores bazas, de la red computacional más potente del planeta. ¿Que pasaría si una gran parte de los nodos mineros desaparecen de la noche a la mañana? ¿Afectaría esto a su precio?

Técnicamente la red se reajustaría de forma instantánea y seguiría su curso normal, pero posiblemente un suceso similar afectaría al precio, debido al menos, al eco mediático generado.

Los halving son eventos curiosos, pues en teoría eliminan de un plumazo a muchos mineros debido a que el costo de minado no compensa, a no ser que el precio del Bitcoin se doble.

Pero la realidad no es tan simple. Por supuesto los mineros quieren precios altos, sus recompensas y comisiones las perciben en Bitcoins, pero por otro lado sin mineros la red Bitcoin pierde fuerza, lo que a su vez, y tras un «efecto mariposa», hace que el precio de Bitcoin se devalúe.

También debemos recordar que una transacción Bitcoin tiene comisión, y los mineros pueden determinar siempre que transacciones aceptan en función de la comisión. En materia de decisiones y políticas pueden determinar el precio de Bitcoin.

La volatilidad

Probablemente te estés preguntando como si una moneda tan volátil puede funcionar. Si algo caracteriza y asusta de Bitcoin es justo eso, la volatilidad. Esto es lo que aumenta el precio del Bitcoin, o lo baja. Esto quiere decir, que hoy puedo tener 100€ y mañana tener 80€ o 120€. Seguramente te preguntas: ¿Cómo puede ser fiable un sistema así?

Es muy importante entender que Bitcoin nace en 2009. Cualquier nuevo intercambio de valor sufre en sus primero años de volatilidad, y Bitcoin no está al margen de ello. La volatilidad parte de la especulación. A diario, miles de personas intentan comprar barato y vender caro. Cuando una persona compra y posteriormente vende está haciendo que llegue a otras manos, lo que repetido millones de veces, junto a actividad mediática, genera que vayan llegando millones de nuevos usuarios a él. Esto es justo lo que está pasando.

Algo que en principio parece absurdo y pura especulación genera la propagación del mismo, con él las alegrías y tristezas de decisiones especulativas en plataformas de intercambio. ¿Acaso Bitcoin se habría hecho tan famoso si la gente no lo viese como un medio de inversión? Tiene muchas ventajas, pero para que realmente tengan sentido tiene que ser un sistema global. Para conseguir esto, se ha de pasar por unos años de expansión. Una que le permitirá a sus usuarios disfrutar de todo su potencial.

Futuro del precio del bitcoin

No es una tarea sencilla. De poco sirve analizar el precio actual y el histórico si no es para observar una tendencia a lo largo de su historia.

Pese a que Bitcoin usa tecnología superior a la que usan gobiernos y bancos, nadie sabe qué puede pasar en el futuro. No sabemos cómo evolucionará la tecnología, el consumo energético…

3 de cada 4 Bitcoins que existirán ya se encuentran en el mercado. Aquí puedes ver un gráfico real de como se han emitido y cuántos bitcoins hay en circulación.

Además, las estimaciones indican que 3 de cada 4 bitcoins se están usando como ahorro, como reserva de valor. Si además cuentas que muchos se han quedado bloqueados para siempre por perdidas de claves privadas. Con esto, el resultado de Bitcoins reales que pueden usarse en el día a día es aun más limitado.

Los detractores de Bitcoin defienden que es algo que podría desaparecer en cualquier momento. ¿Pero cómo haces desaparecer por arte de magia algo que tienen millones de personas y cada mes alcanza nuevos usuarios de forma exponencial? Un sistema abierto, transparente, con algunas de las mejores mentes del planeta trabajando en él, muchos por placer.

Bitcoin, cuando se analiza con tiempo ves que parece ser mucho más fuerte, justo y poderoso para el usuario incluso que el dinero fiduciario de un país.

Recordemos que un Bitcoin es divisible, y tiene 100 millones de satoshis (su unidad más pequeña), pudiendo llegar un futuro donde equipararse 1 satoshi con 1 céntimo de euro y valer el millón de euros que anteriormente mencionamos, ¡pero ojo! Bitcoin funciona por consenso, y esa cantidad de decimales podría aumentarse si llegase a ser necesario y la mayoría de los nodos estuviese de acuerdo.

Keep calm and relax

Sea como sea, BTC llegará a valer lo que la gente esté dispuesta a pagar por él. Esto es como hemos mencionado, porque el precio de bitcoin viene determinado por la confianza de sus usuarios. Pero también por la oferta y la demanda en los mercados de intercambio.

Actualmente centenares de tiendas aceptan Bitcoin como medio de pago y con Bit2Me Commerce se pueden integrar los pagos con criptomonedas en los comercios electrónicos y físicos.